El miedo escénico puede destrozar cualquier buena presentación. Un pánico imposible de controlar que te obliga a tartamudear, a dudar de tus palabras, a perder la mirada cada vez más enrojecida y acabar matando un proyecto, una idea, una promoción o aquello que querías conseguir.
Descrita medicamente como glosofobia, el miedo excesivo e irracional a hablar en público tiene unos síntomas, que seguro podemos reconocer, aunque sea sin diagnóstico: sudoración, dolores estomacales, sequedad en la boca, aumento de la tensión arterial o rigidez extrema.
Controlar y vencer este miedo, sólo es posible con entreno y práctica. Hazlo siempre que puedas o te obliguen. Reta al miedo!.
Y valga un ejemplo familiar. Mi hijo tenía verdadero terror, durante toda su etapa escolar, a hablar ante la clase, preguntar o hacer una presentación. Sufría en exceso, no dormía las noches anteriores, tenía molestias estomacales, hasta que un día se le pidió que hiciese el discurso de clausura de un acto educativo ante un auditorio de 300 personas. Y si, pasó por todos los síntomas descritos en la glosofobia, pero lo consiguió. Realmente, la superación de este desafío le está siendo muy útil.
Uno de los antídotos para combatir este pánico es, una vez reconocido, utilizarlo como motivación. Conscientes que se pasará fatal, pero que sea el motor que te anime a preparar profundamente la intervención. Atrévete! Todos somos vulnerables.
No todos podemos hacer una balada explicando nuestro miedo, pero aquí te dejo a Joe Kowan, diseñador y músico americano, que lo explica en esta canción. Espero que te guste y te pueda ayudar!